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Nos emocionamos al escuchar el fluir del río.
La energía compartida entre el agua, arena y rocas
orquestan una sinfonía inexplicable.
Sumerjo mis pies anclados a la Tierra.
Sin embargo puede que nuestra mente limitada
no logre entender la razón por la cuál el agua fluye.
Pareciese en ciertos momentos hasta injusto, cuando evidenciamos la sequía.
Dejaré de controlar, para dejarme fluir.
Dar inicio a la mirada que nos lleve al beso húmedo.
El acorde que formule una canción.
Un trazo que diluya un poema.
La pincelada que dibuje un sentimiento.
Un simple switche que ilumine tu hogar.
Fluir es parte del renacimiento,
donde somos capaces de dar vida en los mausoleos.
donde somos capaces de dar vida en los mausoleos.
Tallar un pedazo de madera abondanodo en el bosque.
Generar una chispa de esperanza al abandono.
Reconocer las ganas de crear y volar alto.
No permitas que el ego te haga dudar,
te haga sentir incapacidad o ansiedad por escacez.
Tampoco lo juzgues, demuéstrale amor.
Hazle sentir que puede vivir contigo sin sabotear.
La infinidad del río me invita a continuar,
a reconocer la dinámica.
Tomar un paso a la vez.
Mayo 16, 2020
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