Te recuerdo lindo

 


Pasé varios 25 de diciembre contigo abuela, pero no recuerdo que en alguno de ellos hayamos celebrado tú cumpleaños. Sin embargo hoy te quiero recordar bonito y valiente, elocuente y sensible, dulce y decidida.

Contigo aprendí a soñar, jugando juntos a encontrar figuras entre las nubes. Aprendí la competencia sana a través de las sopas de letras. A prestar atención a esos finales crueles de las historias que me contabas, mientras me devoraba la bolsita de papel que me trajiste de la bodega, cargada de dulces sorpresas. Me enseñaste a no rendirme al leer tú libro, al igual que a transformarme y ser distinto para no repetir conductas aprendidas. Me mostraste que la apariencia física no determina la calidad humana del hombre, validando el uso de cabello largo, aretes y tatuajes. Contigo aprendí a hablarle a las plantas y a permitirles una vida libre a los animales. Si no eres Blancanieves, te parecías igualita.

Cada vez que veo líneas de luz proveniente del Sol que se oculta detrás de las nubes, me lleva a esos libros que tenías en el apartamento. Fuiste el primer adulto que vi colgar una pintura hecha por un niño, en medio de la sala. A pesar de ser reservada y respetuosa para con tus maestros saboteadores, le soltabas un sano “Coño e’ tu Madre” sin faltarles el respeto, cargado de humor y sabiduría.

Recuerdo una vez verte rodeada de perros, y te dije: Si los perros la persiguen, no me imagino la cantidad de hombres que lo hacen también. Casi se cae como Condorito y la cara se le puso de tomate jejejejeje. Mi mamá no paraba de reír, pues con usted la elocuencia nos hacía cómplices.

La Andinita es mi libro favorito, y aunque ya no guarde una de sus copias, lo llevo conmigo. Mi amor por escribir lo llevo como ADN entre mis letras. Un tiempo vacilé en la idea de escribir una segunda edición con el fin de entregar copias a cada niet@, pero la energía que usted imprimió en cada ejemplar es lo que lo hace único y especial. Es cierto que es una historia triste, pero su vida y lo que me entregó, contrarresta ese sentir, mostrándome con su mirada que nunca es tarde para continuar y que siempre hay tiempo para seguir adelante.

Gracias abuela por ser una heroína en mi vida y por haber sido la madre que mi mamá decidió tener para ser dulce conmigo. Eres el lindo referente de abuela que todo nieto sueña tener, eres esa luz que sigo viendo en el cielo, la dulzura que se despierta cuando juego con mis hijos a pescar entre las nubes, quién me regaña al consumir THC y quién disfruta mi melena a través del espejo. Aunque a veces sienta melancolía por no haberte disfrutado de adulto, gracias por permitirme sentirte cerca.

¡Feliz Cumpleaños¡


Diciembre 25, 2021

Fuera de mí

 

Photo by Ihor Malytskyi on Unsplash


Por alguna razón pasé por aquí.
Percaté tus sombras, el brillo, la historia.
Por alguna razón pensé en tí. Descansé.

Sin tener una razón, analicé.
Casi culmina el 2021 y ni te registré.
Me percato en distracción, fuera de esencia.

Alejo la culpa, atraigo consciencia. Esa que no te toca.
Y aunque tu boca lo provoca, no te pronuncio.

Gracias por traerme de vuelta. Tu paso por mí.
Siento tu luz, el presente, la vida.
Por alguna razón pasé por aquí. Escribí.


Diciembre 6, 2021